después de muchas discusiones, de momentos de tensión, de dolor contenido y de no saber ya qué más, la situación explotó. el cuatro de septiembre se tomó la decisión. llevar a D. solo un mes. solo un test. solo un poco de espacio. de tiempo. para todos. ella lo necesitaba y eso era lo más importante. por ella cualquier cosa.

el día uno de octubre D se fue de casa. sin rechistar. no queriendo. no entendiendo pero aceptando. 

veinticuatro días después hablamos. horas y horas. me enseñó su habitación. temporal. sus compañeros. temporales. sus cenas. sin sabor. paseamos cogidos de la mano. compartimos como siempre las galletas con chocolate. me contó lo mucho que nos echaba de menos. D quería comer rico. quería disfrutar de sus paseos por la playa. de las siestas en su cama. quería jugar al dominó. quería pasear sin parar. por el huerto. D tenía ganas de volver a estar en familia. D contaba los días que le quedaban.

hoy, íbamos a recogerlo. hace un año. hoy. hoy, cuatro de noviembre era el día que D volvía a casa. hoy, un año y dos semanas después. por la noche. misma hora. y ahora juntos otra vez. 

de echarla de menos a echarlos de menos.